"La Justicia no existe por la naturaleza, existe por la Ley"

25 de desembre 2006

La Iglesia no tiene perdón

La Iglesia católica italiana rechazó ayer celebrar los funerales de Piergiorgio Welby, el enfermo de distrofia muscular al que, el miércoles, un médico desconectó del respirador artificial que le mantenía en vida, secundando su deseo, repetidamente manifestado, incluso ante notario.
"La voluntad de poner fin a su vida, afirmada de manera pública, es contraria a la doctrina católica", esgrimió por la tarde la oficina del vicario de Roma y presidente de la Conferencia Episcopal Italiana, Camillo Ruini, en un comunicado dado a conocer por la televisión pública, la Rai, para negarle la ceremonia, inicialmente prevista para hoy.


Esta es la noticia publicada en el periódico del pasado día 23.

Choca contundentemente que alguien como Welby, una persona que no ha hecho daño a nadie y en todo caso a sí mismo -si a poner fin a su interminable sufrimiento se le puede poner el adjetivo de dañino- no haya podido disfrutar de los servicios funerarios propios de su confesión. Y choca profusamente cuando no hace muchos días Augusto Pinochet, asesino declarado los tuvo con toda la pompa que la Iglesia sabe procurar a sus ceremonias más elitistas.
La Iglesia se enfrenta cada día a retos que hacen balancear a sus estructuras pero es en la base de la misma donde más se cuestiona algunos planteamientos decimononicos que de tan viejos se han hecho obsoletos y rancios.
Hechos como los presentes sólo hace que día a día la jerarquía se quede más sola y, más radical.
No parece que el mensaje de Jesús de Nazaret vaya por el mismo camino. ¿Quizás, realmente, no era hijo de ese Dios que dicen adorar los padres de la Iglesia? Por que yo sepa Jesús defendía a los humildes, a los necesitados, a los pobres, a los perseguidos. Se juntaba con rameras y con gentes de baja ralea.
¿Donde está la comprensión, la caridad, el perdón?
Estoy convencido de que Jesús sabrá recompensar a Welby. De hecho me gustaría creer en ello.